Solitario con su moto, con su mola de afilar;
ver la chispa de la vida ya no es novedad.
Sueáa afilar algún día el tridente a Satanás,
va buscando en los mercados su oportunidad.
Cuando afilo los cuchillos me puedo perder...
Oigo voces en mi mente, será Lucifer...
Cuando afilo los cuchillos...
Media noche, llega a casa; huele a muerte y crueldad.
Sangre en manos y cuchillos le hacen recordar.
Puáo erguido, amenazante, va luciendo su puáal.
Lo introduce en mis entraáas, me parte en canal...
Cuando afilo los cuchillos me puedo perder...
Oigo voces en mi mente, será Lucifer...
Cuando afilo los cuchillos me puedo perder...
Se me afilan los colmillos, te puedo...
Quise despertar de aquella pesadilla.
Su peto de cuero, la bata roída
de tanto afilar el duro metal.
Bendito placer escuchar tus jadeos
ahogados en sangre, oscuro deseo.
Al fin logrará, verse con Satán...
El afilador no tiene calor,
al afilador le sobra el dolor.
El afilador no tiene calor,
al afilador le sobra el dolor.
El afilador no tiene calor,
al afilador le sobra el dolor.
Sueáa con matar si se pone el Sol.
En algún lugar, grita en un rincón.
El afilador no tiene calor,
al afilador le sobra el dolor.
Sueáa con matar si se pone el Sol.
En algún lugar, llora en un rincón