Amanecer
y ver tu rostro sonreir,
es un placer, un privilegio para mí.
Buscar la luz
en el fulgor de tu mirar,
es despertar con el amor.
Mirar que el sol
en tu cabello se anidó,
y la alborada
en tu sonrisa se escondió,
ver que mi verso tiene un ritmo y un color
es un placer.
Amanecer
con la importancia de saber
que soy de ti, que pertenezco solo a ti,
que nunca más mis sueáos frío sentirán
es ya tener un porvenir.
Amanecer
y ver que tengo junto a mí
lo que hace tanto, tanto tiempo pretendí,
es un placer, un privilegio para mí.