De los cerros tucumanos me llevaron los caminos
Y me trajeron de vuelta sentires que nunca se harán olvido
Y me trajeron de vuelta sentires que nunca se harán olvido.
Un grillo feliz llenaba su canto de azul y enero
Y al regresar a los llanos yo le iba diciendo mi adiós al cerro
Y al regresar a los llanos yo le iba diciendo mi adiós al cerro.
Como ese grillo del campo que solitario cantaba...
Así perdida en la noche también era un grillo, vidala y zamba...
Así perdida en la noche se va mi zamba, palomitay.
A los cerros tucumanos he vuelto en un triste invierno
Tan sólo el monte y el río, envuelto en mis penas, pasar me vieron
Tan sólo el monte y el río, envuelto en mis penas, pasar me vieron.
La luna alumbraba el canto del grillo junto al camino
Y yo con sombra en el alma pensaba en la ausencia del bien perdido
Y yo con sombra en el alma pensaba en la ausencia del bien perdido.
Como ese grillo del campo que solitario cantaba...
Así perdida en la noche también era un grillo, vidala y zamba...
Así perdida en la noche se va mi zamba, palomitay.