Era una noche cualquiera
Me sentía preso de la soledad
Te brindé mi casa
Mi cama y mi almohada
Sin pensar que podía ocurrir
Nada de nada
Pero no fue así
No fue una noche cualquiera
A mi manera yo te amé
Besando tus besos
Tu carne y tus huesos
Poco a poco me fuiste envolviendo
Con la ingenua pureza
De tu alma blanca
Tú, tú tienes la culpa
De que yo te quiera
Tú, por aceptarme
Tal como era
Encendiste la llama
Y prendió la hoguera
Y por eso no fue
Una noche cualquiera
Tú, tú tienes la culpa
De que yo te quiera
Tú, por dejarte robar
Tu primavera
Despertaste
Mi alma adormecida
Y sentí que a mi vida
Volvía el amor
No fue una noche cualquiera
Me sentía vivo acariciando tu piel
Bebiendo las horas
Probando el sabor de tu miel
Poco a poco me fuiste envolviendo
Con la ingenua pureza
De tu alma blanca
Tú, tú tienes la culpa
De que yo te quiera
Tú, por aceptarme
Tal como era
Encendiste la llama
Y prendió la hoguera
Y por eso no fue
Una noche cualquiera
Tú, tú tienes la culpa
De que yo te quiera
Tú, por dejarte robar
Tu primavera