La mitad de lo que soy yo te lo debo a ti
Hemos compartido luz, tormentas y esperanzas
El camino de la mano alguna nube gris
Un atardecer y tantos días de ignorancia
Que no quiero apartarme de ti
Por mucho que haya ruido hay un silencio atrás que duele oír
Que no quiero soltarme de aquí
Que tu cuerpo es mi casa
Tu boca el fin, me quedo para morir
Hubo viento de poniente y se quedó a dormir
Pero siempre se equilibra nuestra balanza
Siete días de silencio, treinta sin dormir
El orgullo, tu bondad y la desesperanza
Que no quiero apartarme de ti
Por mucho que haya ruido hay un silencio atrás que duele oír
Que no quiero soltarme de aquí
Que tu cuerpo es mi casa
Tu boca el fin, me quedo para morir
Yo solo me siento en el banquillo de acusados
Soy la irracionalidad, el presente es mi pasado
Lo que viene huele mal, terraplenes oxidados
Las caricias dónde están, vienen golpes inventados
Soy el cero antes de hacer el examen que me marco
Cada día al levantar, me trato como a un soldado
Deja un trozo grande a un lado, que al pesar también lo sano
Deja el trozo amarrado al otro, que en verdad no pesa tanto
Que no quiero apartarme de ti
Por mucho que haya ruido hay un silencio atrás que duele oír
Que no quiero soltarme de aquí
Que tu cuerpo es mi casa
Tu boca el fin, me quedo para morir
La mitad de lo que soy hoy me lo debo a mí