Mi padre se cortó las venas,
Y yo hago temas de poemas de problemas
Que me queman y me quedan como un traje.
Facturando la maleta, llena pena,
Continuando el viaje. ¿Si no qué queda?
Y a veces pienso que nunca llegaré al cielo,
Cansado por todas las cargas que llevo.
Lo veo arriba, y me repito que no puedo.
Si ahora salto, dime, ¿tú crees que vuelo?
Enfadado, quizá una fase del duelo.
Embarrado, con esa mierda hasta el cuello.
Deslumbrado, por el fuego y su destello,
Mientras todo arde, en este mar de
Putas, camellos.
Hiperrealismo en beast mode.
Juntos pero separados, como un istmo.
Pensando si hubiese sido todo distinto,
Si yo fuese, si hubiese hecho,
Siempre lo mismo.
Luego siempre vuelvo al ritmo,
Con esta máscara, gastada ya de tanto usarla,
Que me pongo cuando estoy detrás de un micro,
Cómo si no cargase nada a la espalda.
Cómo si me creyese mis propias charlas, pero hoy no,
Porque oigo, odio y farándula.
Porque veo desde mi ventana cómo todo acaba,
Con la mirada estática de una gárgola.
Porque veo en el reflejo del espejo
A una persona que detesto y que no sabe pasar página.
Porque llego tarde, como disculpas o consejos que no dí,
Y que ni yo mismo pongo en práctica.
Pero si salto ahora, ¿tú crees que vuelo?
¿Que puedo cambiar, cómo en una fábula?
Estoy muy cansado de comer suelo,
Del seudo cáncer que es esta cárcel elástica.
De la música, de los falsos te quiero,
De los gritos por los nervios, del veneno de tarántula,
Que es este ego, de los versos que escribí,
De los besos que no te di, de la vigilia que me asalta.
Y ya no sé qué va a pasar, pero,
Voy a saltar pa ver si vuelo.
Cómo tú me dijiste, "La vida es triste,
Pero el consuelo, es que también es mágica".