Si algun da yo te dije
que mecer mis hojas
no era cosa fcil
y t lo hiciste con las ganas
bien seguras de alzar lo propio,
cmo pudiste hacerme cambiar as,
pudiste hacerme parte de ti?
de tal manera que parecen primavera
esos dos aos de estacin.
Cuando despus de tanto verso
me entregaste el s con cuerpo y alma
no dilatamos en ver qu tena
de grandioso amarse, y era ms all
de lo preescrito por quien dice conocerlo todo,
conocerse en s,
y qu bien poco te conoc a ti.
Y si algn da
te dijera: te fijaste cmo
se nos fue la sonrisa
y se qued el recuerdo
de esas tardes de rivera
con el sol en raya?
Qu tiempos,
qu das felices!
Cmo fuese, no me acuerdo
ni quiero acordarme,
pero el sol me di
a media cara,
confinndome al olvido
sin buscar tu nombre
y a llorar contigo.
Si hay un reecuentro
un mal da de estos puede,
puede que pueda ser.