Como echo de menos salir a perder el tiempo
Que no es mío, ni tuyo ni del resto
Viviendo en una tina
Con el agua desbordada
Hasta las cortinas
Los cerámicos empapados
De tanta información
Abriendo la dilatación
No quedan manos en cuestión
Y menos cabezas para procesar
Tanta conmoción
Peces dorados amarillos
Siempre en mis bolsillos
Los llevas cerca
Para no olvidar lo que soy
Que entre las ratas
Acuáticas
Bien cuaticas
Desnudan la tribulación
La calle nos provoca la nostalgia
En dosis de rutinas exacerbadas
Por primera vez cumplimos el sueño de estar adentro
Con servicios interconectados
Dueños de momentos,
Pero sin interior
Como los monos en 2d
Que nos acompañaron
La infancia
De bicicletas cross
En 4 tablas y una rueda
Que nos paseaba
Con vecinos, amigos
Dueños del mundo
Mientras las hambrunas mataran a los débiles humanos
Lastres y crónicos de siglos
Produciendo el sosiego desastre
De amar las flores arrebatas
Sin saber que en que en el fondo del jarrón
Viven los peores monstruos del sin sabor.
Porque en el fondo
La mayoría pertenecemos ahí
En la cartografía más grande de la desilusión
Ya no cavaré más mi propia tumba
Porque el que hoy escribe
Mañana será otro
Mientras tanto sonrío para no aullar
Y así no morir en el intento de convertirme
En lo que no quiero ser.