Siguiendo la huella de un alacrán
Llegué hasta el fondo de un manantial
Después de arañar y arañar hasta sangrar
Me transformé en un alacrán
Después volví a mi planeta de cristal
Rozaba el cielo con todo y aguijón
Tu presencia humana me quiso tocar
Ya no te importó y te lanzaste sobre mí
Ya te quemaste
Ya te quemaste
Pasaron siglos y seguimos en el aire
Logramos censurar los espectros del dolor
La selva madre sus brazos nos abrió
Logramos escapar del tremendo tentador
La ciencia nunca nos pudo descifrar
La mente humana nos quiso castigar
La vida siempre nos quiso retener
Y al final nada nos separó
Ya te quemaste
Ya te quemaste
Ya te quemaste
Ya te quemaste
Ya te quemaste
Ya te quemaste