LEVÁNTATE MUJER
Levántate mujer que ya no queda
Ninguno de los que te condenaban.
Levántate mujer que yo tampoco,
Que yo tampoco voy a condenarte.
Levántate mujer pues, sobre todo,
Está tu dignidad que es lo más grande.
Levántate mujer que Dios te ama
Y nadie está perdido para él.
LEVÁNTATE MUJER, NUNCA TE RINDAS.
LEVÁNTATE Y EMPIEZA UNA VEZ MÁS.
LEVÁNTATE MUJER QUE TUS HERIDAS
JESÚS LAS TOCARÁ Y LAS SANARÁ.
LEVÁNTATE MUJER QUE HAY UN CAMINO
Y UNA VIDA NUEVA QUE EMPRENDER.
Levántate mujer de tu caída,
Levántate mujer de tu traspié.
No olvides que Jesús te está esperando,
Que tú eres importante para él.
Levántate mujer, no te avergüences,
Pues nadie está exento de caer.
Levántate mujer y vuelve a casa,
En donde alguien ya te quiere ver.
RECITADO:
Mujer, hoy nadie se atrevió a tirarte la primera piedra. Quizás porque se dieron cuenta de que solo Dios puede juzgarte. Quizás porque se dieron cuenta de que Dios no busca la muerte del pecador, sino que se convierta y viva. Mujer, yo soy el Buen Pastor que desde el día en que te fuiste del redil salí a buscarte. Mujer, si quieres regresar, ahora mismo, permíteme curarte las heridas, permíteme decirte, sin reproches, que tú eres mi oveja preferida.