Antes de que me quede sin saliva,
Decirte cuanto te pareces a mí.
Tendrás que desaprender lo que sabías,
Mover las piedras para poder salir.
El peligro de olvidar lo salvaje,
Tu instinto sabe que no sirve escapar.
Estas en el jardín aullando esta noche,
Cazando el tiempo que perdiste al dormir.
Al fin entiendo, porque soy cielo y aire, y aún transpira mi carne.
Regreso a la manada, estuve en el infierno, no enfriaron mi corazón.
La ley dice matar, comer o morir,
Devoraste hasta tu hogar por placer.
Jugaste con el bosque y te metiste en mi boca,
Y ahora es tiempo de que empieces a ver.
Que somos uno, no seas feroz conmigo, los dos queremos lo mismo.
Al fin entiende, porque es de cielo y aire, y aún transpira su carne.
Al fin entiendo, porque soy cielo y aire, y aún transpira mi carne
Regreso a la manada estuve en el infierno, pero no enfriaron mi corazón.