Que se quede el infinito sin estrellas
o que pierda el ancho mar su inmensidad
pero el negro de tus ojos que no muera
y el canela de tu piel se quede igual.
Si perdiera el arcoiris su belleza
y la flores su perfume y su color,
no sería tan inmensa mi tristeza,
como aquella de quedarme sin tu amor.
Me importas tú, y tú y tú
y nadie más que tú...
me importas tú, y tú y tú
y solamente tú.
Ojos negros piel canela,
que me llegan a desesperar,
me importas tú, y tú y tú
y solamente tú.