La tarde al caer
Se atora en mi piel
Y los bellos momentos
Se van sin temer
La pantalla me muestra
El color de tu ser
Y las fotos la carne
Que puedo perder
La mirada me dice
Que debo correr
Y el suelo devora
Mi oportunidad
La batalla comienza
Alrededor de mi ser
Y tu boca se abre
Sin pensarlo una vez
Y el día nos alcanza
El momento llegó
Fulminante silencio, la sinceridad
El cuadro del dolor
La bomba estalló
De pronto oscurece
Y mis ojos perdí
Cuando cae la noche
Y la luna enciende
La sal amarga el alma me dejó
No me pude perder
No tenía el poder
Y la brújula del tiempo
Apuntó en otra dirección