Sabes: ¿si la estrella envejece
y se apagan sus rayos,
adónde va su amor?
Cuéntame: ¿si el árbol se desgaja
y cae hasta la tierra,
a quién espera ya?
Piensa: ¿no fue la primavera
la que brotó en tus brazos
como una enredadera
de noche junto al mar?
Dime: ¿no comprendiste entonces
que todo lo que tuve
lo puse entre tus labios
mojados por mi amor?
Cómo se fueron las quimeras
por una senda artera
que el tiempo ya quebró,
donde perdí tu sombra amada,
tu boca enamorada
¡el sol de mi pasión!
Siento que el peso de los aáos
se fue llevando todo
lo que había en mí de ti
e hirió mi eternidad.
Ahora los vientos del olvido
se han llevado tu nombre
porque manchaste mi alma
con la noción del fin,
con la emoción del fin.