Le marcaron un camino que no supo recorrer le mostraron los peligros a los que debía temer siempre fue la oveja negra que escapo del redil se perdió entre la maleza por ser algo más confundió las apariencias de su propio Dios rebosando entre sus venas un dulce amargor Gastó la vida que ella regaló, jugando a ser mayor se hizo viejo sin querer Sangre fresca tiáe el día que dejo de padecer esa madre junto al hijo ya dejo de sufrir las campanas del olvido redoblan por él Gastó la vida que ella regaló, jugando a ser mayor se hizo viejo sin querer gastó saliva para replicar palabras que no llegaran a ver la claridad el mundo que ella construyo a base de fuerza y valor escapa por la ventana Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer Gastó saliva para replicar palabras que no llegaran a ver la claridad el mundo que ella construyo a base de fuerza y valor escapa por la ventana